Dos calcetines de invierno, deshilachados y roídos, cubriendo unas peludas patas humanas que se posicionan para atinar en el váter. Dos meneítos y torno en el eje sobre las baldosas de diseño, separadas por juntas de silicona mermada por las gotas que van cayendo del inodoro. Estoy sólo frente al […]